Ventajas de asistir a un colegio privado desde el kinder

La educación de las escuelas en la Colonia del Valle está garantizada desde el kinder, ya que estas instituciones ofrecen algo más que instrucción académica. Los deportes extraescolares y los actos culturales fomentan el crecimiento físico, creativo y social de los alumnos, lo que les inspira a buscar otras áreas fuera del aula donde puedan triunfar.

Ventajas


Grupo especializado

Los profesores de colegios privados suelen tener mucha formación. Como una gran parte tiene títulos de máster o doctorado, dos factores importantes en su proceso de decisión son la competencia y el entusiasmo por las materias que enseñan. En consecuencia, les motiva ofrecer una enseñanza y una atención de alta calidad.

Esto es lo que marca la diferencia en los primeros años, cuando el aprendizaje es muy delicado para todos.

Infraestructura tecnológica

Los mejores institutos privados cuentan con grandes bibliotecas y laboratorios informáticos. Nunca les han faltado libros ni material de estudio de ningún tipo. Esto favorece enormemente el bienestar, la seguridad, la autonomía, la motivación y el crecimiento académico y emocional de los alumnos.

Mejor preparación para las etapas siguientes

Los niños de seis años suelen estar bastante preparados y seguros de sí mismos para hacer la transición del kinder a la primaria, y el proceso de adaptación transcurre de manera idónea.

Atención individualizada

El hecho de que los colegios privados suelan tener menos alumnos por clase que los públicos es uno de los principales factores que influyen en la decisión de los padres. Esto implica que sus hijos recibirán la atención individualizada que necesitan para desarrollarse. En estas escuelas infantiles, la atención que se presta a cada niño es también muy personalizada, ya que se llega a un acercamiento más adecuado con sus familias.

Mejores resultados

La posibilidad de personalizar la atención, la especialización y la estrecha comunicación con las familias contribuyen a que se puedan detectar y abordar rápidamente los problemas de desarrollo o los cambios en el crecimiento de los más pequeños. Esto es crucial para garantizar un desarrollo adecuado en fases posteriores.